El nombre del blog

El otro día un amigo tímido o al que le dan alergia los comentarios me mandó un correo preguntando por una explicación del nombre del blog. Cometió dos errores: mandarme el correo a una cuenta que no miro casi nunca y intentar buscar sentido a algo que ha salido de mi cabeza.Y yo cometí un error: ponerle un nombre con sentido al blog. Así las cosas, os cuento como pasó todo(utilizaré seudónimos para los protagonistas) :

Una noche de verano salimos tres amigos a tomar algo.Hacía bastante tiempo que no quedábamos, así que pillamos algo de bebida y nos sentamos en un banco del parque a hablar un rato.Uno de los tres (de ahora en adelante "Agobios") estaba bastante nervioso por temas de trabajo y otras movidas suyas.Empezó a contarnos todas sus movidas mientras Ausente(el que faltaba) hacía gala de su seudónimo y servía la bebida a su bola.Una vez Agobios terminó Ausente le dió su opinión estándar, que todos conocíamos y sólo cambiaba cuando se hablaba de política, "Tío, tranquilo y no te agobies.Pasa de todo".Todo esto dicho mientras se liaba el primero de la noche y nos decía la pasta a la que tocábamos por cabeza.Al parecer a Agobios no le solucionó la vida tan sabia frase y me miró como preguntando que opinaba.

"Si fuese tú no haría caso a Ausente" Y no se me ocurrió más que decir, así que me puse a contar monedas para reunir el dinero."No se puede dejar todo de lado, pero al menos yo necesito desconectar de vez en cuando.Ojalá todo fuese más fácil, pero supongo que también sería mucho más aburrido" Me volví hacia Ausente para darle el dinero (es curioso que la misma persona que pagó todo fuese la que echase las cuentas).Y en ese momento se me ocurrió una de esas reflexiones que suelo guardarme para mí para que la gente no me mire raro.Ni que decir tiene que esta vez lo solté sin pensarlo:

Es jodido pero es así.Imagina que eres una moneda guardada en un bolsillo.Está todo oscuro y vives siempre con la incertidumbre de si te usarán para pagar el café cada vez que te llevan hasta la cafetería.Y de repente un día te das cuenta de que el bolsillo tiene un agujero y te decides a escapar.Aprovechando el impulso del movimiento dentro del bolsillo te cuelas y caes al suelo.Y te ves allí, solo en un mundo que no parece tener fin y del que sólo puedes ver una pequeñísima parte.Te sientes libre y feliz.Y en ese momento, otra persona te encuentra tirado en la calle y contento con su suerte te mete en su bolsillo.

Dicho esto ambos me miraron de forma rara y cambiamos de tema.

Supongo que como siempre lo ideal sería el punto medio.Al fin y al cabo no valoramos suficientemente lo que tenemos una vez nos acostumbramos a ello.No creo posible vivir siempre dentro o fuera del bolsillo.Así que yo mientras tanto seguiré buscando agujeros entre las costuras...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No se acerca mucho a la realidad.Creo que has sido injusto conmigo xD

Jarrek dijo...

Nada nada, la verdad duele.Y créeme, podía haber sido mucho mas cruel...
:-D

Anónimo dijo...

Como aun no te he escrito ningún comentario, aprovecho ahora.

Como ya te dije en persona, cada vez me sorprendes más, vaya rayaduras de cabeza que tienes, pero a mi, tu reflexión en voz alta me ha molado bastante. Dedicate a esto.
Nos vemos en los bares.

Jarrek dijo...

Me alegro de que te guste.Como digo a todos, comenta lo que quieras.
De todas formas creo que te sorprendes con demasiada facilidad :-)

PD:a ver si cambiamos de bares...