Probando, probandooo

Bueno pues aquí estoy.Aquí está el resultado de uno de mis venazos repentinos.De todas formas, a pesar de haber tomado la decisión tras pensarlo mas de cinco segundos no prometo periodicidad ni constancia.La idea de jubilar el cuadernito donde apunto mis tontunas ya me rondaba por la cabeza hace tiempo, pero hasta el día de hoy no he movido ficha.

Tumbado en la cama me despierta el ladrido del perro del vecino.Acordándome de la utilidad de los bozales intento dormir de nuevo, pero los ladridos no cesan.Me tapo la cabeza con la manta.Ladridos.Cabeza debajo de la almohada.Ladridos.Mosqueado me levanto a la cocina a beber un vaso de agua, son las 7 de la tarde pasadas en el reloj de la cocina(y en el del resto de relojes de la casa, supongo).Ladridos.De vuelta en la habitación me tumbo de nuevo en la cama y tras una o dos vueltas consigo conciliar el sueño de nuevo.Recuerdo poco del sueño, salvo que tenía algo que ver con perros.Ladridos y miro la hora:8 menos cuarto.Me levanto de mala leche y me doy una ducha.Exacto, ladridos.Los vecinos deben estar trabajando y no estan en casa.Tras reconocer mi impotencia para callar al chucho(nótese esa antipatía creciente) comienzo a pensar divertido en las diversas "caricias" que le haría.Se han mudado hace poco y no los he visto demasiado, pero creo recordar que el perro es un caniche(sí, y con el acabado típico de perro refinado).Ladridos.Salgo de la ducha y me imagino pisando una suave alfombrilla de pelo de caniche.Tener un perro en un piso; darle de comer,sacarle a pasear...Más ladridos y de pronto, silencio.Intrigado, me parece oír una voz del piso de abajo.Parece que por fin han vuelto sus dueños.Me siento en el sofá disfrutando del ahora maravilloso silencio.El timbre de la puerta suena bruscamente y me levanto de un salto.La voz alegre de mi cuñada me pide que abra desde el portal.Casi lo había olvidado, esta noche venían a cenar.Abro la puerta de la casa esperando a que lleguen en el ascensor cuando oigo de nuevo ladridos.Parecen lejanos pero su volumen aumenta por momentos hasta que cesan de repente.Se abre la puerta del ascensor y sale mi cuñada nerviosa y sonriendo:

-¡Mira, te traemos una sorpresa! - y ladea la cabeza hacia el ascensor mientras de la puerta salen mi hermano y, atado con su correa, su perro.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Moi! escribe escribe que yo te leo y no te preocupes que muy en serio no te he tomado nunca! ni a ti ni a nadie ahora que lo pienso...